Caso Snowden: precedente
para un foro internacional entre la privacidad y la seguridad nacional
En los últimos
años el argumento que sostiene que la secrecía de documentos de seguridad
nacional es indispensable para el funcionamiento de la misma, ha sido rebatido
por infiltraciones electrónicas realizadas por ciertos individuos que se han convertido en importantes
centros de debate dentro del sistema internacional.
El caso de Julian
Assange, fundador del portal wikileaks, sentó un precedente en el sistema
internacional. Por primera vez, un individuo filtró a los medios de
comunicación importantes documentos de seguridad nacional de diversos Estados.
Además, Bradley Manning, soldado estadounidense, se encargó de divulgar
información secreta de su propio ejército al ya mencionado portal.
Edward Snowden es
un ex-empleado de la Agencia Central de Inteligencia estadounidense, CIA, y a
la vez, es un ex empleado de la Agencia Nacional de Seguridad estadounidense,
NSA. El nombre de Snowden salió a la luz pública a mediados de 2013 cuando The
Guardian, un periódico londinense de gran importancia, publicó información
secreta tanto del gobierno británico como del gobierno estadounidense.
En Junio de 2013
y estando en Hong Kong, Snowden concedió entrevistas en las cuales expuso,
según sus propias consideraciones, el excesivo espionaje estadounidense. Fue en
esa época cuando el mundo conoció la revelación de cómo grandes compañías como
Apple, Google y Facebook entre otras, entregaban información a agencias
gubernamentales de seguridad e
inteligencia. Además, el mundo se enteró de PRISM, el programa electrónico
ultrasecreto que utilizaba y aun utiliza la NSA para monitorear e interceptar
las conversaciones y los correos de ciudadanos alrededor del globo.
Snowden alegó que
su divulgación de la información secreta a los medios masivos de comunicación
respondía a su creencia personal en el respeto a la privacidad y a la libertad.
Pues según Snowden los gobiernos no tienen derecho de interferir en la esfera
privada de la vida de sus ciudadanos.
El presidente
Barack Obama se pronunció públicamente ante el caso Snowden. Obama afirmó que
los sistemas de recolección de información y datos utilizados son necesarios para garantizar la
seguridad de la población. A la vez, reafirmó que es necesario que los
ciudadanos cedan un poco en temas como la invasión a la privacidad y a la
libertad, para que el gobierno sea capaz de garantizar su seguridad. Además,
altos funcionarios de Estados Unidos resolvieron que los pronunciamientos de
Snowden constituyen un crimen que debe ser penalmente castigado.
Diversos jefes de
Estado alrededor del mundo se pronunciaron en contra de la divulgación de
información secreta, pues de acuerdo a lo que plantean, dicha divulgación
repercute directamente en la seguridad nacional de cada Estado.
Ejemplo de ello
se demuestra en las declaraciones del Primer Ministro británico, David Cameron,
quién alegó que la divulgación de
información de inteligencia tiene graves repercusiones, por lo que ordenó al
periódico The Guardian a destruir los archivos remitidos por Snowden.
Por su parte,
numerosos países negaron el asilo al ex empleado de la NSA. Pues aun cuando Snowden pidió protección a diversos
países alrededor del mundo, su petición fue negada por “inconsistencias
jurídicas”. Varios países objetaron sobre
la imposibilidad de usar la figura de asilo político para Snowden, pues
afirmaron que el solicitante de asilo debe solicitarlo dentro del territorio
del país en el que desea ser eventualmente refugiado.
Snowden salió de
Hong Kong, en donde inicialmente dio las entrevistas a The Guardian, a Rusia.
Una vez en Rusia pidió asilo a Ecuador, sin embargo, la petición no le ha sido
concedida por las “inconsistencias jurídicas” ya mencionadas.
Mientras se
soluciona su caso, Snowden se encuentra en territorio ruso. En Julio, el
presidente Vladimir Putin, expresó que la estadía de Snowden en Rusia debe ser
temporal, a la vez, planteó la imposibilidad de enviarlo a Estados Unidos por
la probabilidad de que lo sentencien a pena de muerte y por la inexistencia de
un tratado bilateral de extradición entre ambos países.
De acuerdo a los
hechos mencionados, es posible observar que el caso de Edward Snowden, al igual
que el caso de Julian Assange que se encuentra refugiado en la Embajada de
Ecuador en Londres, ha sido un caso complicado de manejar en el sistema
internacional.
El caso Snowden
ha sido de difícil manejo debido a que sus revelaciones lo convirtieron en un
importante y conocido personaje de la opinión pública global. De manera que lo
que suceda con Snowden va a encaminar a numerosos debates por parte de actores
de la comunidad internacional.
A la vez, el caso
Snowden ha sido de difícil manejo por el debate que plantea en torno a la
aparente imposibilidad de conciliar la privacidad individual y la seguridad
nacional.
Para cualquier
Estado es indispensable manejar información de inteligencia y seguridad privada.
Pues la posesión de información secreta asegura que los actores "enemigos”
o contradictores no conocen la estrategia de acción del Estado en cuestión y,
por consiguiente, que no tienen ventaja. Sin embargo, la divulgación de la
información secreta realizada por Snowden, y previamente por Assange, pone en
descubierto los alcances que manejan los Estados para conseguir dicha
información.
Tras las
revelaciones que se han hecho durante los últimos años, la opinión pública
tiene conocimiento de cómo la seguridad nacional extrae información que teóricamente
pertenece a la esfera privada de la vida de los ciudadanos.
El caso Snowden
sienta un precedente de un debate en torno a la ponderación de la privacidad versus
la seguridad nacional y dicha discusión será analizada por la comunidad
internacional. Por consiguiente, la necesidad de la secrecía de los archivos de
inteligencia deja de ser un lujo para los Estados y se convierte en un foro de
discusión internacional.